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Jorge P. Yakoncick

Textos


 

 

 

 

 

 

 

 

Ráfagas

 

1.

 

La prolongada espera de tu instante,

un nido de visiones, de misterios

que tejen y destejen las palabras.

Enigma de tus labios, de la yema

de tus dedos que dicen del calor

de tus abrazos. Yo no te recuerdo

más que en tus palabras, en unas letras,

ladrillos que insinúan la metáfora.

En cambio, de tu imagen atesoro

un destello de singular belleza,

un espejar que ciega en la sonrisa,

fulgor mediterráneo de las hojas

del olivo, la sal en las narinas,

la angustia… tentación de tu cintura

 

 

  

3.

 

Se desprenden fragmentos de tristezas

dotando de penumbra a la penuria,

mojones de un perderse en cada sitio,

recuerdos que el olvido va tallando

para dejarnos puros de nostalgia.

Huella perenne de tu piel viajera,

como vacía marca que se amolda

al cuidado de besos y caricias,

sensible al tibio aliento del susurro

cuyos significantes inaudibles

desnudan en la voz al animal

paciente que te cela en ese rastro,

buscando postergar lo impostergable.

Incierta luz y sombra es la memoria.

 

 

 

4.

 

Ahora, que no he de volver a verte,

tu voz será un vibrar en mi memoria;

si hasta en los sueños a veces te escucho.

Se gastará de a poco ese recuerdo…

He prometido hablar sobre tu voz,

sin embargo, nada hasta ahora he dicho.

Mi silencio te olía en los jazmines

que preludian, alegres, la tormenta,

y acecha en la vergüenza de los días

intentando la inercia del olvido.

Ineludible tarea del tiempo,

demoler cada roca de esa pena

que supuso ignorar, pero intuir,

el sabor de tu voz apenas labio.

 

 

 

5.

 

Te clama el aire en el silbar del viento,

entre los juncos, entre las pendientes

ramas de los sauces que se recuestan

a enjuagar sus llantos en esta orilla,

donde tu risa prístina se escucha:

un eco de cristales percutidos,

estallar de burbujas campanitas,

una suelta de alegres cotoninas,

marejada de timbres y colores,

un canto de sirena alucinado…

Te imita el aire en el silbar del viento,

te trae desde orillas tan lejanas

a mi oído pendiente, que se inclina

a recordar, a recrearte en sueños.

 

 

 

7.

 

Serás visible sólo en tu paisaje

de piedras soleadas y de caminos

sinuosos que descienden a la mar.

Serás visible sólo en esas letras

que entremezclas y a veces escatimas.

Pero más allá no sé si podrías

mostrarte, no sé si reflejas luz.

Sospecho muchas veces que no existes,

que eres un juego, una trampa que tiende

mi memoria. A veces te recuerdo

brevemente, y aún así sostengo

que no existes. Pero están los paisajes,

vocales, consonantes, las mareas

que dejan caracolas con tu voz.

 

 

 

 

8.

 

Retomando distancia, su analgesia

primordial, sentenciada en la ceguera

por aquel: “ojos que no ven”…se sabe.

A veces, sólo un mínimo detalle

que rompa el terrible agobio, no importa

si tal o cual. Nuevamente has dejado

atrás aquellas amables caricias

que por momentos son tan dolorosas.

Otras veces no del todo se sabe,

quizá el terrible mínimo detalle,

abrupto, nos alerte en el insomnio.

La mayor de las veces ni siquiera.

De todas formas habrá que emplazar

la alegría en el curso de los días.

 

 

 

 

9.

 

Cuán largo será tu abrazo mujer,

y de cuánta calidez será. Valga.

Estas entre tu ‘pronto’ y  tu ‘demora’,

ahí estás, esa es casi tu distancia,

negada por deseo de ceder,

no simple tentación  desesperada.

¿Quiso el incontrolable azar (pregunto),

o acaso el ardid, esa picardía,

de verse justo en el mirar del otro,

no deja –quizás- ya de ser un pacto?

Alguna vez se romperá el hechizo

y habrá, seguro, bruma del enigma.

Te cuento que se siente en la pisada,

por el día, la noche o la mañana.

 

 

 

2008. Inéditos

 

 

 

 

 

 

Esperando El Diluvio

 

Esperando el diluvio, 1991.

 

 

Yako

Pequeño miserable

El mundo se te escapa

El hueso que roías en tu ser

No es más que gelatina

 

Ya que

Esencialmente vives a la rastra

Pega a ras tu hocico

Inhala polvo

Busca

Busca

En el fondo de la ojera la mirada

Grietas

Pálido organismo amortizado

Tus padres tus muletas tu amuleto

Letras alcoholes y tabaco

 

Ya sos

Accidente extendido

Entre el reflejo de tu máscara y tu máscara

Agotada división quebranta tiempos

 


 

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